¿Tienes o quieres un coche de gasolina? Si la respuesta es afirmativa, debes saber que el filtro de gasolina es uno de los elementos más importantes que repercuten al buen funcionamiento de tu coche. El filtro de gasolina tiene una función muy importante para el motor y es que para enter cómo de importante es este elemento, simplemente basta con saber que es el encargado de evitar que las impurezas del combustible lleguen al motor. Pero vamos a profundizar un poco más, ya que debes conocer muy bien este elemento para evitar posibles averías.
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La función del filtro de gasolina
El filtro de gasolina filtra el combustible para evitar que lleguen al motor las impurezas que puede contener el combustible o, incluso, el propio depósito. Esa función hace que se conserve el motor en un mejor estado, al mismo tiempo que garantiza el buen funcionamiento de nuestro propulsor. Se trata de un elemento de vital importancia ya que además, nos ayudará a alargar la vida útil de nuestro motor siempre y cuando se encuentre en buen estado. Por lo que tan importante como conocer las funciones de este elemento, será revisar el filtro de vez en cuando para comprobar que no está obstruido y sigue cumpliendo con su misión principal.
Como hemos dicho, el filtro de la gasolina se debe mantener en buen estado y revisarlo de manera regular. Y para eso, nos hará falta saber dónde se encuentra. Si eres un amante de la mecánica puede que este paso sea innecesario, aunque nunca está de más refrescar los conocimientos. El filtro de gasolina es un elemento que, por lo general, se ubica en el bajo de los coches. Normalmente lo puedes encontrar a la salida del depósito donde se almacena el combustible y acostumbra a tener un recubrimiento metálico. Además, la mayoría de los coches que llevan la bomba de gasolina sumergida en el depósito, incorporan un primer filtro en la aspiración de esta bomba. En el resto de casos, lo normal es encontrar el filtro en el compartimento del motor, cerca de la línea que lleva a la entrada del combustible.
Cómo saber si el filtro de gasolina está sucio
Una vez ubicado el filtro de la gasolina, esta información no debe caer en saco roto. Conocer su ubicación nos permitirá revisarlo de manera regular como es necesario, para asegurar la conservación de nuestro motor. Entre las causas que influyen en la obstrucción del filtro, las más comunes son no haberlo cambiado cuando correspondía, utilizar un carburante de mala calidad (que puede contener muchos residuos), el estilo de conducción o un exceso de humedad del que ningún coche está exento. Algunos de esos factores son ajenos a nosotros, pero afortunadamente hay señales que evidenciarán cómo no está todo en orden.
Un filtro de gasolina sucio puede impedir la correcta circulación del combustible. ¿Qué quiere decir eso? Que el motor tendría un funcionamiento irregular que podría acabar provocando graves averías. Pero además, un filtro sucio permitiría el paso de impurezas que aumentarían la fricción entre las partes móviles del motor, que ocasionarían un rápido desgaste que afectaría a otros componentes de la mecánica como los inyectores, la bomba de alta presión o cualquiera de los elementos del sistema de inyección.
Además de todas esas obstrucciones, si el filtro de gasolina se encuentra en mal estado se apreciarán también ruidos extraños, una dificultad añadida a la hora de arrancar el vehículo, una reducción de potencia que incluso puede llegar a detener el vehículo en plena marcha, problemas en el rendimiento y la aceleración y un aumento en el consumo de combustible. Como puedes ver las señales son significativas y llamarán tu atención con facilidad, reclamando una limpieza urgente con la que poder evitar daños mayores.
Cuándo cambiar el filtro de la gasolina y precio
Tan importante como conocer los problemas derivados de un filtro de gasolina en mal estado, es ser conscientes de cuándo tenemos que cambiar este elemento. La mayoría de los fabricantes recomiendan hacer la sustitución a los 60.000 kilómetros, aunque eso supondría haber estirado al máximo su vida útil. Para garantizar un funcionamiento óptimo del motor e ir sobre seguro, los fabricantes aconsejan hacer el cambio en la mitad de tiempo: los 30.000 kilómetros ya marcan un límite y nos aseguran evitar problemas añadidos.
Te puede resultar curiosa la diferencia de kilómetros ya que ambas son recomendadas por los fabricantes, pero hay una diferencia muy a tener en cuenta: hasta los 60.000 kilómetros el filtro de gasolina puede aguantar pero no se asegura estar exento de averías. Algo que salvo defecto, sí está garantizado cuando haces el cambio cada 30.000 kilómetros. Si quieres ir sobre seguro, sustituir el filtro a la menor distancia recomendada te garantizará que los inyectores, la bomba de presión y los circuitos se encuentren en buen estado y eviten problemas en tu motor.
Entendemos que existiendo las dos opciones, pasar asiduamente por el taller le resulte alarmante. Pero la realidad con el filtro de gasolina es que su sustitución, es una tarea sencilla y no muy costosa. Sobre todo porque podemos hacerlo nosotros mismos, siempre y cuando tengamos unos conocimientos mínimos. En el mercado existen muchos tipos de filtros, pero los más utilizados son los blindados o de cartucho. Su precio suele oscilar entre los 20 y los 110 euros, teniendo en cuenta incluso una mano de obra que tiene una duración aproximada de entre 15 y 30 minutos y nos evitará posibles complicaciones o errores, que no queremos cometer.
Como ves, el cambio del filtro de gasolina es mucho más fácil de lo que te podrías imaginar y conservarlo en buen estado, vital para asegurarle una larga vida a nuestro coche. Estar atentos a su estado simplemente nos reclama realizar las revisiones que recomienda el fabricante y prestar atención a cualquier señal que podamos sentir. Dos pequeños factores a tener en cuenta que junto al cambio de filtro cuando sea necesario, nos ahorrarán muchos dolores de cabeza y problemas mayores en nuestro medio de transporte habitual.
