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Conducir es una actividad que requiere absolutamente toda nuestra atención. Sin embargo, cuando el sueño se apodera de nosotros, nuestras habilidades al volante se ven gravemente comprometidas. Mantenerse alerta es vital para la seguridad en la carretera, ya que incluso una breve pérdida de concentración puede tener consecuencias desastrosas. Es por eso por lo que la somnolencia es uno de nuestros peores compañeros de viaje.

Este efecto disminuye la capacidad de reaccionar rápidamente ante situaciones imprevistas, aumenta el riesgo de cometer errores y nos hace más propensos a sufrir un accidente. Es, en cierto modo, comparable a conducir bajo los efectos del alcohol, con unos tiempos de reacción más lentos, la disminución de la conciencia de la situación y toma de decisiones que se extienden más en el tiempo de lo que lo haríamos en perfectas condiciones.

Factores que producen sueño al conducir

¿Qué produce sueño al conducir?

La somnolencia al volante puede ser provocada por una combinación de factores, como veremos a continuación. Reconocer y abordar estas causas es fundamental para mantener la seguridad en la carretera:

La fatiga acumulada y la falta de sueño: estas son las causas más comunes de somnolencia. Cuando no dormimos lo suficiente, nuestro cuerpo no tiene tiempo para recuperarse como debiera, afectando negativamente nuestra capacidad de concentración y nuestros reflejos. Conducir después de una noche de poco descanso o en horarios en los que normalmente estamos durmiendo, como la madrugada o la noche, aumenta significativamente el riesgo de sentir sueño al volante. 

La monotonía de la conducción en trayectos largos o en carreteras poco estimulantes: esto también induce a la somnolencia, incluso si estamos relativamente bien descansados. Ir por largas rectas y sin muchos cambios en el entorno visual puede hacer que nuestro cerebro se desactiva parcialmente, entrando en un estado de baja alerta. La falta de estímulos nuevos y la ausencia de actividades que mantengan nuestra mente ocupada pueden llevarnos a un estado de “piloto automático”, y la probabilidad de quedarse dormido aumenta. 

Problemas de salud subyacentes y ciertos medicamentos: condiciones como la apnea del sueño, que interrumpen el sueño y reducen la calidad, puede dejar a una persona fatigada de forma crónica, siendo más propensa a dormirse al volante. Asimismo, los medicamentos como los antihistamínicos, antidepresivos y ciertos analgésicos, tienen efectos secundarios que inducen somnolencia. Es crucial leer las etiquetas y estar consciente de cómo pueden afectar la capacidad de conducir de manera segura.

Las condiciones ambientales: situaciones como el calor excesivo en el habitáculo del vehículo también pueden contribuir a aumentar la somnolencia. Por eso es crucial que el interior cuente con una ventilación apropiada, especialmente en los meses más calurosos del año, algo que se puede hacer bajando las ventanillas, activando la recirculación de aire y disfrutando del fresquito que el sistema de climatización del coche nos ofrece.

¿Cuáles son las señales de la somnolencia?

Reconocer los signos que nos inducen a la somnolencia es vital para tomar las medidas preventivas pertinentes. Bostezar frecuentemente, tener dificultad para mantener los ojos abiertos o sentir que nuestra mente divaga son señales claras de que es hora de parar y descansar. Ignorar estos síntomas puede llevar a microsueños, períodos cortos en los que uno se duerme durante unos segundos sin darse cuenta, algo que no hace falta decir, pero es extremadamente peligroso. 

Para evitar la somnolencia al volante, es importante descansar adecuadamente antes de emprender un viaje, tomar pausas regulares durante trayectos largos y, si es necesario, tomar una breve siesta para recargar energías. Además, mantenerse bien hidratado, no haciendo comidas copiosas y activar la circulación moviendo ligeramente las extremidades también puede ayudar bastante a mantenernos despiertos y alertas mientras conducimos.

¿Cómo puedo quitar el sueño al conducir?

Para evitar el sueño al conducir, es fundamental combinar lo que os vamos a explicar bajo estas líneas, aunque hemos de decir que, si la somnolencia persiste e intuyes que te puedes quedar dormido a la primera de turno, lo más seguro es detenerse y descansar un poco antes de continuar el viaje. Recuerda siempre que, priorizar la seguridad al volante, ayuda a prevenir accidentes y garantiza un viaje más seguro para todos los usuarios de la vía, no solo el tuyo.

Hacer pausas regulares es una de las estrategias más efectivas para combatir la somnolencia al volante. En trayectos largos, conviene parar cada dos horas o cada 150-200 kilómetros para estirar las piernas, moverse y tomar un breve descanso. Estas paradas permiten que el cuerpo se recupere, la mente se despeje y evitemos el estado de “piloto automático” que puede inducir el sueño. Incluso una breve caminata de cinco minutos o unos ejercicios de estiramiento pueden reactivar el flujo sanguíneo y ayudar a mantener la vigilia.

Consumir cafeína o bebidas energéticas te proporcionará un plus temporal para mantener la alerta. El café, el té o las bebidas energéticas que contienen cafeína, que es un estimulante natural del sistema nervioso central, te ayudarán a mantenerte espabilado por un tiempo, aunque sus efectos pueden tardar unos 20 minutos en sentirse. Sin embargo, es importante recordar que la cafeína no sustituye el descanso y sus efectos son temporales; una vez que pasa su efecto, la somnolencia puede regresar, e incluso con mayor intensidad.

Mantener el vehículo bien ventilado y a una temperatura agradable también puede ayudar a prevenir el sueño al volante. Ya lo decíamos, conducir en un ambiente caluroso y sin la ventilación adecuada puede inducir una sensación de letargo y sueño. Mantener las ventanas ligeramente abiertas para permitir la entrada de aire fresco. También, utilizar el sistema de climatización del coche para mantener una temperatura fresca, puede ayudar a mantenerte más despierto y alerta.

Escuchar música o tener conversaciones interesantes pueden estimular la mente y evitar que caiga en la monotonía. Elegir música con un ritmo animado o escuchar podcasts y audiolibros que mantengan el interés hacen su parte para que el cerebro permanezca activo y alerta. Es importante elegir contenidos que no sean demasiado relajantes o monótonos, ya que esto podría tener el efecto contrario y fomentar la somnolencia.

Hilando un poco con el punto anterior, viajar acompañado, si es posible, también puede ser una excelente manera de mantenerse despierto. Un buen copiloto te ayudará a mantener conversaciones para que estés activo. Además, este también puede ofrecerse para tomar el volante en caso de que necesites descansar o, simplemente, no te apetezca conducir. La presencia de otra persona puede proporcionar un apoyo extra en la vigilancia y la seguridad durante el viaje, siempre y cuando no se dedique a distraerte con el móvil.

Consejos extras para mantenerse despierto al volante

Además de las estrategias comunes para combatir la somnolencia al conducir, los ejercicios de activación mental pueden ser extremadamente efectivos. Involucrar la mente en tareas simples pero estimulantes puede ayudar a mantenernos despiertos y alertas. Por ejemplo, resolver problemas matemáticos sencillos, puede mantener el cerebro activo. Otro método es realizar ejercicios de memoria, como recordar la lista de compras o recitar mentalmente letras de canciones. 

Los juegos de observación y concentración también son una gran manera de mantenerse alerta. Observa los vehículos que hay a tu alrededor y juega con las matrículas de diferentes años, o trata de contar cuántos coches rojos ves en un tramo determinado. También puedes fijarte en los nombres de las salidas de las autopistas o en los letreros de tiendas y empresas que pasas. Estos juegos no solo mantienen la mente activa sino que también incrementan tu conciencia del entorno. Lo que puede mejorar tu capacidad para reaccionar ante imprevistos en la carretera.

Asimismo, la tecnología moderna ofrece varias herramientas y sistemas para ayudar a los conductores a mantenerse despiertos y alertas. Muchos coches actuales vienen equipados con sistemas de alerta de somnolencia que, gracias a una cámara instalada en el salpicadero, monitorean los patrones de conducción y advierten al conductor en caso de detectar signos de cansancio. Estos sistemas usan otros sensores para evaluar el movimiento del volante, la velocidad y el comportamiento general del conductor.

Por eso algunas apps y gadgets para monitorizar el estado de alerta también son útiles para prevenir la somnolencia al volante. Existen aplicaciones móviles que utilizan la cámara del teléfono para rastrear los movimientos de los ojos y la cabeza, alertando si muestran signos de fatiga. Otras aplicaciones pueden programar recordatorios para tomar descansos, mientras que gadgets como las pulseras de actividad o dispositivos que se colocan detrás de la oreja pueden vibrar o emitir sonidos si detectan que el conductor está cabeceando.

Combatir el sueño al conducir es crucial para la seguridad vial. Al entender las causas de la somnolencia y aplicar todo lo que has leído, podrás reducir significativamente el riesgo de accidentes por estar demasiado cansado al volante. Lo más importante sin duda alguna es estar bien descansado y disfrutar del viaje manteniendo un ambiente óptimo en el interior del coche y tomar descansos regulares para garantizar un viaje seguro y sin incidentes.