Sabemos que las mascotas son como un miembro más de la casa y eso supone que forman parte de nuestros planes cotidianos. Por eso, el mismo espacio que se les da en nuestro hogar también lo encuentran en nuestro coche, y esa experiencia trae consigo unos datos preocupantes debido a la manera en la que viajamos en el coche con nuestra mascota. Porque al fin y al cabo son como un pasajero más. Según un estudio llevado a cabo por el RACE, uno de cada tres conductores asegura viajar con su animal en el coche y en concreto, el 11,5% de estos, confiesa no utilizar ningún sistema de retención para sus fieles compañeros. Un detalle que no puede pasar desapercibido, ya que se convierte en un riesgo significativo de lesiones para todos los ocupantes del vehículo.
Más allá de las cifras, es evidente que las familias que no tienen dónde dejar a su mascota en vacaciones deben llevarla consigo a su destino y eso ha hecho que se multipliquen, especialmente a raíz de la pandemia, los destinos “dog friendly”. La oferta de productos relacionados con nuestras mascotas crece exponencialmente y a su vez eso genera un efecto inevitable: a mayor integración animal, mayor necesidad de ciertas regulaciones y normas que faciliten el día a día de dueños y mascotas. Pero sobre todo, que aporten seguridad a la hora de viajar. En ningún caso nuestro perro, gato o mascota puede ir suelta por el habitáculo y al igual que tu responsabilidad como conductor es llevar el cinturón abrochado, los animales también tienen que ir bien sujetos como te explicamos a continuación.
Índice de contenidos
Cómo llevar tu mascota en el coche
A pesar de que la mitad de propietarios de un animal no son conscientes de qué directrices seguir para viajar con su mascota tal y como recoge el estudio del RACE sobre el papel de los acompañantes en la conducción, sí hay una mayoría (91%) que considera peligroso, tanto para el animal como para los pasajeros, llevar a tu mascota sin protección. Pero independientemente del grupo en el que te encuentres, a continuación te damos las claves para evitar situaciones de alto riesgo para esos viajes con tu mascota a bordo:
- El animal no puede ir suelto por el habitáculo: los riesgos existen para la mascota y el resto de ocupantes. En caso de accidente incluso pueden suponer un peligro para los equipos de rescate y a nivel económico, viajar con tu mascota suelta puede implicar una sanción de hasta 100 euros.
- Elegir un sistema de retención adecuado: igual que el cinturón de seguridad se adapta a nosotros, como dueños debemos encontrar un sistema que proteja a nuestra mascota. Entre los disponibles se encuentran los arneses de sujeción, los transportines o los separadores del habitáculo.
- Controla a tu mascota en las paradas: al abrir el maletero o la puerta del coche, el animal puede seguir corriendo y poner en riesgo a otros usuarios.
- Evita colocar objetos cerca: en caso de accidente pueden salir despedidos y dañar a tu mascota.
- Acostumbra al animal al sistema de sujeción: si suele desplazarse habitualmente en el coche, asegúrate desde cachorro a usar todos los sistemas de retención necesarios para ese trayecto.
- No sujetar al animal con su correa: este elemento no es un sistema de retención y en caso de impacto, supone un riesgo importante de lesiones para tu mascota y también, para el resto de ocupantes.
- No dejar, bajo ningún concepto, a tu mascota en el interior del coche a solas: vigila las altas temperaturas y asegura una ventilación adecuada en cada momento pero, sobre todo, no dejes a ningún animal dentro del habitáculo. Ni siquiera en una zona de sombra o con las ventanillas abiertas.
- Controlar el posible mareo: si tu mascota tiende a marearse, es aconsejable que no coma ni beba en las horas previas al viaje. Una vez comience el trayecto, durante cualquier parada podrás aprovechar para que beba en pequeñas cantidades.
Preparación para un viaje con tu mascota
Tan importante como saber de qué manera puede viajar tu fiel compañero contigo, es realizar una buena planificación del viaje, sobre todo, si vas a pasar mucho tiempo al volante. Lo primero que debes tener en cuenta es que tu mascota siempre viajará más segura en la parte trasera. En caso de que sea un perro de gran tamaño y no quepa cómodamente en ese espacio, la mejor alternativa es llevarlo en el maletero utilizando rejillas divisorias para que el espacio del habitáculo quede totalmente separado. Y a partir de ahí, trata a tu mascota como a uno más.
Igual que es importante tu bienestar durante el viaje, también lo es el de tu mascota. Planifica paradas regulares aproximadamente cada dos horas, ya que es una buena frecuencia tanto para la mascota como para ti como conductor. Es probable que tu perro se aburra durante los viajes largos, por eso son esenciales esas pausas en las que aprovechará para hacer sus necesidades, estirar las piernas o beber agua. Como ves, poco dista de la actitud humana, pero siempre, antes de viajar, sí debes tener los siguientes factores en cuenta:
- Ejercita al perro antes de montarlo en el coche
- Evita darle de comer justo antes de salir
- Coge agua, comida y cuencos para el viaje
- Lleva algunos juguetes o premios masticables para el trayecto
- Echa en los asientos delanteros una correa, sólo para usar en las paradas o cuando lleguéis al destino
Estas indicaciones tan básicas como sencillas, son las que te ayudarán a mantener su comodidad y bienestar durante los trayectos más largos, para poder disfrutar en tu destino.
Lo que dice la norma
Más allá de las recomendaciones sobre cómo viajar con tu mascota en el coche, existen también unas normas que en caso de incumplimiento conlleva un castigo. La Ley de protección, derechos y bienestar de los animales establece que en los desplazamientos el dueño debe atender “las necesidades fisiológicas y etológicas de los animales”, al mismo tiempo que se asegura de que el medio de transporte disponga de espacio y garantice “la seguridad vial y la seguridad”, tanto de la mascota como del resto de usuarios en el trayecto.
En el artículo 13 de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, esos conceptos quedan mucho más claros ya que se establece cómo el conductor debe garantizar que nada le entorpezca ni le dificulte su visibilidad. ¿Qué quiere decir eso? Que debe procurar “la adecuada colocación de animales transportados para que no haya interferencia entre el conductor y cualquiera de ellos”. Precisamente en esa misma normativa, es donde se recoge como infracción muy grave conducir de forma temeraria y grave, hacerlo de forma negligente creando una situación de riesgo.
Ante esos casos es un agente de la Guardia Civil quien considera si el animal viaja en el regazo del conductor o totalmente suelto en el habitáculo, antes de imponer una sanción severa: multas de 500 euros y seis puntos en el carnet de conducir, o 200 euros, respectivamente. Al fin y al cabo, la DGT dedica un amplio contenido a explicar cómo viajar con tu mascota en el coche bastante claro: cuando te desplaces con tu animal de compañía, coloca un separador que eluda que tu mascota te distraiga y te moleste cuando vas conduciendo. Al seguir estos consejos podrás viajar con tu mascota de manera segura y cumplir con las normativas de tráfico evitando multas innecesarias. Pero sobre todo, estarás priorizando la seguridad y el bienestar de tu fiel compañero.
Te dejamos aquí una serie de recomendaciones para viajar con tu perro en el coche.